(456) ¿TAN CIEGO CAMINAS?

1
¿Tan ciego caminas
en densas tinieblas,
si Cristo te llama a ti, pecador?
óyele llamando,
te dice que vuelvas,
él quiere llevarte a senda mejor.

2
¿Tan necio caminas
confiando en ti mismo?
¿desprecias la voz
de Jesús el Señor?
¿tan necio caminas
con rumbo al infierno,
en donde por siempre
estará el pecador?

3
La flor más hermosa
marchita ligera;
así es tu vida, así es, pecador.
Tu vida presente es una quimera,
tan sólo es eterna
con Cristo el Señor.

4
Acepta a Cristo,
Señor de señores,
él fue a preparar un lugar para ti
Si quieres dichoso,
vivir entre flores,
allá en el hermoso jardín del Edén.

(457) TAN SOLO OÍR MI MADRE EN ORACIÓN

1
Qué dulce y qué feliz
me es el recordar,
que junto con mi madre fui al altar;
mas ella un día pasó,
se fue con el Señor,
y hoy oírla quiero en oración.

CORO:
Tan sólo oír
a mi madre en oración,
(tan sólo quiero oir)
tan sólo oir y ver su devoción;
(tan sólo por oir)
¡oh, qué feliz eso era para mí!
(qué dulce y qué feliz)
tan sólo oir mi madre,
orar por mí.

2
Oraba ella por mí
pidiéndole al Señor,
que siempre le siguiera firme y fiel;
confiando en él estoy,
creyendo le veré,
y un día junto con ella, allá estaré.

3
De aquel feliz hogar recuerdo
sin cesar, los cantos que
cantábamos los dos;
recuerdo que al llegar,
derecho iba al altar,
llevándome consigo a la oración.

4
Su vida terminó,
su ejemplo me dejó,
de serle fiel y orarle al Salvador.
Ahora sin cesar yo quiero trabajar;
yo quiero allá a mi madre
ir a encontrar.

Lorenzo E. Salazar
(458) TAN SOLO POR FE

1
Soldado del Señor Jesús,
alerta vamos ya,
mil enemigos a abatir
en lucha sin cuartel.
Valientes guerrilleros,
son audaces sin igual.
Mas la victoria la tendréis
tan sólo por la fe.

CORO:
Tan sólo por la fe,
tan sólo por la fe,
vencido será Satán,
porque es poder de Dios.

2
Las huestes enemigas
van luchando por doquier;
hombres y mujeres
son presa de su botín.
Los niños inocentes caen
sin compasión también;
mas la victoria la tendréis,
tan sólo por la fe

3
De amor vuestra bandera alzad,
fuerza tomad de Dios;
heroicos y sin miedo id,
que Cristo al frente va.
Que muera el vicio y la maldad,
que caiga ya Satán.
Mas la victoria la tendréis,
tan sólo por la fe.

4
¡Ayes! de la derrota oíd,
Satán en fuga está.
Los suyos lo abandonan ya,
y mengua su poder.
A Cristo todos proclamad
triunfantes, él es Rey;
pues la victoria él la da.
Tan sólo por la fe.
(459) TE ALABO

1
Te alabo mi Señor, te alabo
porque tú eres el todo para mí,
porque junto a ti voy caminando,
porque siento tu presencia
en mi ser.

CORO.
Te alabo, te alabo,
mi alma no se cansa de alabarte.
Te alabo, te alabo,
mientras vida exista en mi ser.

2
A veces el maligno quiere a
mi alma tener aprisionada,
tu Espíritu Santo que me guía,
me sostiene, y no me deja claudicar
(460) TE DOY GRACIAS

1
Cuando Jesucristo fue clavado
en aquella cruz en el calvario,
era para que yo fuera salvo,
siendo libre de todo pecado.

CORO:
Oh, mi Salvador, yo te doy gracias
por tu gran bondad
y misericordia;
en mi ser has puesto
una esperanza:
Me has prometido una corona.
Cuando sea cumplida tu Palabra,
de tus ricas bendiciones gozaré;
allí será el fin de mi jornada:
¡Cara a cara en la gloria te veré!

2
Por más dura que sea la prueba
sé que tú serás mi fortaleza;
tú irás conmigo por doquiera,
si en verdad soy fiel a mi promesa.

3
No me apartaré de tus caminos
antes lucharé para agradarte;
caminando como peregrino,
no me cansaré de alabarte.

4
Viva y eficaz es tu Palabra,
la cual alimenta toda mi alma;
sobre toda cosa que es guardada
guárdame en el seno de tu gracia
(461) TE ESPERAMOS, OH SEÑOR

1
De los cielos un ángel vendrá,
y en los aires su voz se oirá,
anunciando que Cristo vendrá,
a su pueblo viene a levantar.
Ven, desciende, ¡Señor celestial!
porque eres en realidad;
te debemos adorar
en espíritu y en verdad.

CORO:
Te esperamos, ¡oh Señor!
que nos vengas a llevar,
a tu reino a descansar
para siempre en ese hogar.
Te esperamos, ¡oh Señor!
que nos vengas a llevar;
te debemos adorar,
en espíritu y en verdad.

2
¡Qué feliz el momento será!
¡cuántas voces
gloria a Dios darán!
y el que aclame a Jesús vivirá,
y en su frente su nombre tendrá,
¿qué deberemos todos hacer?
por fe en el Señor confiar.
Te debemos adorar,
en espíritu y en verdad.

3
Oremos al Dios de Israel,
y de Isaac y también de Abraham;
para poder llegar hasta allá
donde mora el Padre celestial.
Con los ojos de toda la fe
aguardamos el final.
Te debemos adorar,
en espíritu y en verdad.

4
¡Santo! ¡Santo! ¡Santo!
Se dirá, a una voz diremos sin cesar:
¡Gloria! ¡Gloria! ¡Gloria! ¡Aleluya!
¡Aleluya! ¡Aleluya a Jehová!
¡Aleluya! ¡Aleluya al Señor!
que nos dio seguridad.
Te debemos adorar
en espíritu y en verdad.

J. Camacho
(

462) TE LOAMOS OH, DIOS

1
Te loamos, oh Dios,
con unánime voz,
que en Cristo
tu Hijo nos diste perdón.

CORO:
¡Aleluya! te alabamos,
¡cuan grande es tu amor!
¡Aleluya! te adoramos,
bendito Señor.

2
Te loamos, Jesús,
quien tu trono de luz has dejado,
por darnos salud, y en la cruz.

3
Te damos loor, Santo Consolador,
que nos llenas de gozo
y santo valor
(463) TEMA DE MI CANCIÓN

1
En las riquezas, en el placer,
ponen algunos su amor;
mas yo tengo un tema,
dulce sin par,
de incomprensible valor.

CORO:
Cristo es el tema de mi canción,
luz centellante de amor,
le alabaré por su devoción,
por su inefable candor;
me fortalece con su poder,
y satisface mi débil ser,
él es la rosa gentil de Sarón,
el tema de mi canción.

2
Como rocío encantador,
de la mañana gentil;
la historia de Cristo y su amor,
me brinda delicia sin fin.

3
Cristo es el tema de mi canción,
fuente de felicidad,
carece de toda comparación,
bellísimo es en verdad
(464) TEMPLO DE NUESTRO DIOS

1
Templo de nuestro Dios
será hoy mi corazón,
¡será hoy mi corazón!
esta hoy, llamada es,
casa de oración;
porque aquí mandará el Señor
su bendición. Todo el que quiera
acercarse a Dios, le hallará en
verdad, en esta casa de oración.

CORO:
Demos alabanza
hoy que ya vino el Salvador,
llamando al pecador
para darle salvación;
el que quiera recibir de Jesús
su bendición, le hallará,
en verdad,
en esta casa de oración.

2
Santo Dios; bendice hoy
esta casa de oración,
¡esta casa de oración!
unidos con fervor te pedimos,
oh, Señor, que escuches
de tus fieles la ferviente oración;
de los cielos obrarás y oirás la
petición de las almas que hay aquí,
en esta casa de oración.

3
Bendición da el Señor
en esta casa de oración,
¡en esta casa de oración!
santas tribus marchad
en pos de la Santa Sión,
alabad y ensalzad
el nombre de nuestro Dios;
que haya paz y contento
en cada corazón, de los que hay,
en verdad, en esta casa de oración
(465) TEN MISERICORDIA

1
Escuché tu palabra divina,
anuncié tu mensaje de amor,
caminaba fiel en tus caminos
y más tarde me alcanzó el tentador.

2
Oh Dios mío ten misericordia
como hiciste con Pedro en la mar,
oh sálvame Dios que perezco
oh Dios mío de toda bondad.

3
Ya no hay paz en el mundo perdido,
ya no hay gozo no hay tranquilidad
porque sólo Cristo lo ha ofrecido,
lo ha ofrecido por la eternidad.

4
Oh cuan triste es la vida del hombre
que se aparta del amor de Dios,
que abandona sus santos caminos
por andar en la senda de error
(466) TENGO MANSIÓN MAS ALLÁ DE LOS CIELOS

1
Llevóme Cristo en visiones al cielo,
y me mostró la Jerusalén;
ciudad hermosa,
viene descendiendo,
para morada de todo fiel.

CORO:
Tengo mansión
más allá de los cielos,
en aquel sitio do Cristo está;
y cuando venga,
su promesa cumplida,
con él al cielo nos llevará

2
El primer cielo y la tierra se fueron,
también los mares ya no serán;
y nuestras penas, dolores y afanes,
al mismo tiempo terminarán.

3
Un cielo nuevo, una tierra esplendente,
calles de oro, mar de cristal;
preciosa piedra, muy resplandeciente,
en esa hermosa y bella ciudad.

4
Sus doce puertas
son piedras preciosas,
y la ilumina gran claridad;
y las naciones que fueron salvadas,
continuamente allá estarán.
(467) TENTADO NO CEDAS

1
Tentado no cedas, ceder es pecar;
mejor y más noble
es luchar y triunfar; ¡valor! pues,
cristiano, domina tu mal;
Dios puede librarte de asalto mortal.

CORO:
En Jesús, pues, confía;
en sus brazos tu alma
hallará dulce calma,
él te hará vencedor.

2
Evita el pecado,
procura agradar a Dios,
a quien debes
por siempre ensalzar;
no manches tus labios,
impúdica voz,
preserva tu vida
de ofensas a Dios.

3
Amante, benigno y enérgico sé;
en Cristo tu amigo pon toda tu fe;
veraz sea tu dicho, de Dios es tu ser;
corona te espera, y vas a vencer
(468) TIEMPOS PELIGROSOS

1
En estos tiempos en que vivimos,
luchando siempre con ansiedad,
en nuestra carne siempre morimos,
por merecernos la eternidad.

CORO:
Luchas debemos sin descansar,
por merecernos la eternidad;
si anhelamos al fin gozar,
andar debemos en santidad.

2
Todo soldado que fiel milita,
debe proveerse de caridad;
es armadura que necesita,
para llegar a la eternidad.

3
En estos tiempos tan peligrosos,
que por doquier vemos mortandad;
Dios nos promete ser victoriosos,
y heredarnos la eternidad.

4
En estos tiempos en que vivimos,
tanta cizaña y obscuridad;
en éstos tiempos de gran peligro
luchar debemos sin descansar.

5
Esto sepamos, que son los días
de gran peligro, postreros ya,
de la venida del Rey de reyes;
debemos siempre velar y orar
(469) TIERRA DE PALESTINA

1
Tierra bendita y divina
es la de Palestina, donde nació Jesús;
eres de las naciones cumbres,
que alumbras con la lumbre,
que derrama su luz.

CORO:
Eres la historia inolvidable,
porque en tu seno se derramó,
\\la sangre preciosa sangre,
del Unigénito Hijo de Dios//

2
Cuenta la historia del pasado,
que en tu seno sagrado
vivió el Salvador;
y en tus hermosos olivares,
habló a los millares
la palabra de Dios.

3
Quedan en ti testigos mudos,
que son los viejos muros
de la Jerusalén;
viejas paredes destruidas,
que si tuvieran vida,
nos hablarían también.

4
Un día serás restablecida
según las profecías
del gran Libro de Dios.
Cuando tus hijos esparcidos,
acepten convencidos
a Cristo el Salvador.
(470) TODAS LAS ALMAS

1
Todas las almas
que oyen este mensaje
la tierna voz de Cristo el Salvador,
es la palabra bendita de Jesús,
que a cultivarse viene a tu corazón.
No la desprecies, acógela en tu alma,
que desde el cielo
hoy te habla tu Creador,
que te arrepientas de tus malos
caminos, y entres a cuentas
hoy con tu Salvador.

CORO:
Si muy rojos tus pecados
fueren hoy,
emblanquecidos por mi amor
lo van a ser,
y en lo profundo de la mar
los echaré,
y nunca más de ellos recordaré;
busca a tu Dios, su justicia
y teme a él,
porque es promesa
que él ha dado con poder,
al que afligido amparo busca en él;
con santo a mor
él le viene a proteger.

2
Arrepentíos y hoy mismo
preparaos, para esperar a Cristo
mi Señor; como relámpago
de oriente al occidente,
es la venida de nuestro Salvador;
nadie sabe la hora ni el momento,
que como juez a la tierra vendrá,
pagando a todos conforme
a sus obras, porque él ha dicho
que así sucederá.

3
Al primer toque de la final trompeta,
todos los muertos en Cristo vivirán,
abandonando el sueño
de la tumba, con Jesucristo
todos se reunirán;
y revestidos de su grande potencia,
como estrellas sus cuerpos
brillarán, será cumplido su gozo
ya esperado, en su Señor
todos se gozarán.
(471) TODO A CRISTO YO ME RINDO

1
Todo a Cristo yo me rindo,
con el fin de serle fiel;
para siempre quiero amarle,
y agradarle sólo a él.

CORO:
Yo me rindo a él,
yo me rindo a él;
todo a Cristo yo me entrego,
quiero serle fiel.

2
Todo a Cristo yo me rindo,
a sus pies postrado estoy;
los placeres he dejado,
y le sigo desde hoy.

3
Todo a Cristo yo me rindo,
sí, de todo corazón;
yo le entrego alma y cuerpo,
busco hoy su santa unción.

4
Todo a Cristo he rendido,
siento el fuego de su amor;
¡oh, qué gozo hay en mi alma!
¡gloria, gloria a mi Señor!
(472) TODO ES POSIBLE

1
Si en pruebas y en dolor,
te encuentras desmayar,
habrá en tu pobre ser
mil dudas y pesar,
sólo Dios podrá cambiar tu ser,
si tan sólo tienes fe, cree en él.

CORO:
Todo es posible si puedes creer,
todo es posible si puedes creer;
fe, mueve la mano de Dios;
fe, en su palabra viva;
todo es posible si puedes creer.

2
Cristo el Señor Jesús,
te invita a gozar,
de plena gracia y luz,
de todo bienestar;
sólo él podrá cambiar tu ser,
si tan sólo tienes fe, cree en él.
(473) TODO POR CAUSA DE MI

1
En una cruz fue clavado,
y todo el mundo se rió,
al contemplarlo sangrando
al ¡nocente de Dios.

CORO:
Cómo sufrió mí Jesús,
todo por causa de mí,
pobrezas, dolores y muerte,
y todo por causa de mí.

2
Le dieron de bofetadas,
le escupieron en el rostro,
le atravesaron su costado,
todo por causa de mí.

3
Dios de los cielos no quiso ya
contemplarlo en la cruz,
pues era su único Hijo
y sentía su dolor.

4
Pero su madre María
le contemplaba de cerca
con lágrimas en sus ojos,
ella lo amaba también
(474) TODOS SOMOS UN REBAÑO EN CRISTO

1
Todos somos un rebaño en Cristo,
y Jehová es el Pastor;
él nos llena de su gracia,
a esta humilde agrupación

CORO:
Todos llenos de entusiasmo,
trabajemos con amor.
En esta preciosa obra,
fuerza nos dará el Señor.

2
El trabajo que ahora se haga,
el Señor lo premiará;
no se olvida de sus siervos,
su corona a cada uno da.

3
Y si nos faltare la materia,
el Señor nos proveerá,
para que el trabajo siga,
y que todo se haga en verdad.

4
Cristo nos dará hoy la victoria;
él es nuestro ayudador,
desde el trono de su gracia
él nos cuida, nuestro Redentor.

Marcial de la Cruz
(475) TOMA TIEMPO PARA ORAR

1
Al amanecer de la hermosa mañana,
cuando las aves trinan
cantos al Señor,
puedo oir esa voz que me llama:
Toma tiempo para orar.

CORO:
En Cristo ahora
pongo mis cargas,
él es más que vida a mí;
él lleva mis desalientos,
todo el día me acompaña aquí;
qué no oyes su invitación
al jardín de oración,
toma tiempo para orar.

2
Si me buscas, yo enjugaré tu llanto,
porque otros no te pueden ayudar;
borraré tus tristezas y quebrantos,
si das tiempo para orar.

3
Cuando mi vida
en este mundo se termine,
y mis penas y dolor se acaben ya,
yo gozoso escucharé la bienvenida,
a esa hermosa ciudad
(476) TOMADO DE LA MANO

1
Si Jesús me dice amigo,
deja todo y ven conmigo,
yo mi mano pongo en la suya,
y voy con él… (repetir).

CORO:
Tomado de la mano
con él yo voy,
tomado de la mano con él
yo voy,
tomado de la mano con él
yo voy, por donde él va.

2
Yo te llevo dice amigo,
a un lugar un reino conmigo,
donde todo es más alegre
y más feliz… (repetir)

Rafael Espinoza
(477) TRABAJAD POR EL SEÑOR

1
Trabajad por los perdidos
sin interés personal,
es labor de redimidos
que Dios nunca olvidará.

CORO:
Trabajad por el Señor,
trabajad por el Señor,
trabajad por el Señor
lo siento en mi corazón.

2
Quieres tener esa dicha,
de en los cielos cosechar,
siembra para los perdidos,
que tú nada perderás.

3
Si con lágrimas tú siembran
con alegría segarás,
Dios es el que recompensa
al que obra con lealtad.

4
Siembra sobre todas aguas
la simiente de verdad,
que después de mucho tiempo,
en los cielos segarás.
(478) ¡TRABAJAD, TRABAJAD!

1
¡Trabajad! ¡trabajad!
somos siervos de Dios,
seguiremos la senda
que el Maestro trazó;
renovando las fuerzas
con bienes que da,
el deber que nos toca
cumplido será.

CORO:
¡Trabajad! ¡trabajad!
¡esperad, y velad!
¡confiad! ¡siempre orad!
¡que el Maestro pronto volverá!

2
¡Trabajad! ¡trabajad!
hay que dar de comer,
al que pan de la vida quisiera tener;
hay enfermos que irán
a los pies del Señor,
al saber que de balde
los sana su amor.

3
¡Trabajad! ¡trabajad!
fortaleza pedir, el reinado
del mal con valor combatid;
conducid los cautivos al Libertador,
y decid que de balde
redime su amor
(479) TRAED LA OFRENDA AL ALFOLÍ

1
«Siervos y siervas de Dios,
traed al alfolí;
haya alimento en mi casa».
Así lo dice el Señor,
así lo dice el Señor

CORO:
Dios mandará bendición
al siervo alegre dador;
lluvias de gracia y amor
del trono de su mansión.

2
Ofrenda de voluntad,
para la obra del Señor;
la recompensa dará
Cristo el Salvador, Cristo el Salvador.

3
El que siembra en bendición,
esto también segará,
el que siembre en escasez,
su fruto escaso será,
su fruto escaso será.

4
Los ricos imitando están,
a aquellos que Cristo vio;
mas aquella pobre viuda,
dos blancas depositó,
todo lo que tuvo dio.

J. Vázquez
(480) TRAS ESE CIELO AZUL

1
Tras ese cielo azul he de ver
a mi Jesús, cuando yo vaya
a la patria celestial; ¡oh, qué placer
será ver su rostro allá!
Allá en el cielo a mi Jesús he de ver.

CORO:
Tras ese cielo azul he de ver
a mi Jesús, cuando yo vaya
tras ese cielo azul.

2
Tras ese cielo azul
hay una mansión de amor,
donde se adora en espíritu
y en verdad, allí no irá todo aquel
que hace mal; allí entrará
el que anda en santidad.

3
Tras ese cielo azul hay una bella
ciudad, tiene sus calles de oro
y de cristal; la claridad del Señor
será su luz, y allí estarán
los creyentes en Jesús.

Beatriz de la Rosa
(481) TREINTA PIEZAS DE PLATA

1
No hay satisfacción
en riqueza mundanal,
si se niega al Salvador.
Esta vida es sólo un sueño terrenal,
cuando andamos sin amor.

CORO:
Treinta piezas de plata
dieron por Jesús,
treinta piezas de plata por él,
quien es la luz,
yo también tengo
la culpa de su muerte cruel,
y te ruego oh Dios
me perdones por ser tan infiel.

2
Su trono de gloria
me ofrece el Salvador,
si abandono el mundo cruel;
él orando al cielo pedía la protección
para la humanidad.

3
Su mansión de mármol
dejó mi Redentor,
por salvar al hombre vil;
mas yo despreciaba su incomparable
amor, fui hundido en males vil
(482) TRIGO SOY

1
Ya se acerca en el cielo la cosecha,
de los campos del Señor, del Señor,
aunque la cizaña crezca
juntamente con el trigo,
tú la apartarás Señor.

CORO:
Trigo soy, trigo soy,
del granero, del granero
del Señor, del Señor;
por la sangre de mi Cristo,
y el poder de Jesucristo
a su granero yo voy.

2
Ya parece que contemplo
a mi Jesús, contemplando su labor,
su labor; gozándose la semilla,
que sembró con alegría,
en mi pobre corazón.

3
Los graneros del Señor
son muy hermosos,
los contemplo con amor, con amor,
de los que los trabajaron,
y nunca se avergonzaron
de los campos del Señor.

4
Por doquiera los trigales
hoy se gozan,
alabando al Señor con amor,
por doquiera la semilla
está siendo esparcida,
la cosechará el Señor.

5
¡Oh!, qué hermoso es vivir
en el Señor, y servirle con amor,
con amor, así el corazón del justo
da su fruto, y florece
en los campos del Señor
(483) TU MANO ME GUIA

1
Cada día, ¡oh Cristo!
bendición nos das,
y en tu fiel promesa
hallo gozo y paz,
y seguirte puedo, porque con amor
guiándome tu mano va, Señor.

CORO:
Cada día mi corazón
colmarás de bendición
y en ningún conflicto temeré;
porque tú conmigo vas,
y tu gracia me darás,
vencedor por ti seré.

2
Inefable gozo das al corazón,
que se entrega humilde
con sincero amor,
sé tú el dueño mío, toma posesión
de mi vida entera, ¡oh Señor!

3
Cada día quiero para ti vivir,
tuyo soy y anhelo a mi rey servir;
dame algún trabajo
que haya en tu labor,
aunque tan inútil soy, Señor
(484) TU PALABRA SANTA

1
Tu palabra santa llama
a todo hombre pecador,
para darle siempre calma,
y librarlo del error.
Si se acepta con el alma
sentirá tu corazón,
que de veras tú le amas,
¡oh divino Salvador!

CORO:
Cielo, estrellas, mar y tierra,
todo, todo pasará;
sólo tu palabra eterna,
por los siglos durará.

2
Tu palabra salvadora,
es verdad, es vida, es luz
que ilumina a toda hora,
hasta donde te hallas tú;
haz que tenga yo la honra
de llevar siempre tu cruz,
y alcanzar así la gloria,
donde moras mi Jesús.

3
Tu palabra es pan de vida,
es sustento espiritual,
cuando llega al alma herida,
le da alivio, le da paz;
todo aquel que la recibe,
nunca, nunca morirá,
porque tú quieres que viva
por toda la eternidad.
(485) TU YO SOY, JESÚS

1
Tuyo soy, Jesús,
ya escuché la voz,
de tu amor habiéndome aquí;
mas anhelo en alas de fe subir,
y más cerca estar de ti

CORO:
Aun más cerca, cerca de tu cruz
llévame, ¡oh Salvador!
aun más cerca, cerca,
cerca de tu cruz
llévame, ¡oh, buen Pastor!

2
A seguirte a ti me consagro hoy,
constreñido por tu amor,
y mi espíritu, alma y cuerpo doy
por servirte, mi Señor.

3
¡Oh, cuan pura y santa delicia es,
de tu comunión gozar;
y contigo hablar, y tu dulce voz
cada día escuchar!

4
De tu grande amor
no comprenderé
cuál es la profundidad,
hasta que contigo Jesús esté
en gloriosa eternidad.